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Una de las historias más famosas es la de Evel Knievel, un icónico motociclista que hizo fama por sus hazañas en su moto. En la década de 1970, Knievel intentó saltar sobre una línea de camiones y remolques en el Caesar’s Palace en Las Vegas, pero falló y sufrió lesiones graves. A pesar de este accidente, Knievel continuó realizando peligrosas acrobacias en su moto y se convirtió en un verdadero héroe americano.
Otro motorista que logró fama en América es el legendario arquitecto Frank Lloyd Wright, quien a la edad de 70 años recorrió más de 4.000 millas en su motocicleta a través de Estados Unidos. Wright hizo paradas en algunos de los lugares más históricos de América, como la Casa de Jefferson en Virginia, el Capitolio de Estados Unidos en Washington D.C., y el Parque Nacional de Yosemite en California.
Una historia más reciente es la del motociclista Bill Warner, quien en 2011 rompió el récord mundial de velocidad en una motocicleta no turbo. Warner alcanzó una velocidad máxima de 311.945 millas por hora en una pista en Maine, Estados Unidos. Este logro no solo rompió el récord anterior, sino que también la hizo una de las hazañas más emocionantes en la historia de las motocicletas.
Pero no todas las historias emocionantes de motocicletas tienen finales felices. En 1937, el famoso viajero y escritor Robert Pirsig sufrió un terrible accidente en su motocicleta en Minnesota. Este trágico evento lo inspiró a escribir su famoso libro ‘Zen y el arte del mantenimiento de motocicletas’, que hoy en día es considerado una obra maestra de la literatura sobre viajes en motocicleta.
Las motocicletas han sido protagonistas de algunas de las historias más emocionantes de la cultura americana. Desde Evel Knievel hasta Frank Lloyd Wright, estos héroes en dos ruedas han dejado una huella indeleble en la historia, y continuarán siendo una parte esencial de la cultura americana por muchas generaciones más.
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